CRIA Y VENTA DE CACHORROS AFIJO "DE FORTE IMPERIO" e.mail deforteimperio@hotmail.com Teléfono:605032316 informate...
lunes, 11 de agosto de 2008
EDUCACIÓN DEL CACHORRO
Lo primero que hay que saber a la hora de educar un cachorro es que hay que armarse de paciencia, de mucha paciencia ya que mayormente estos aprenden a base de repeticiones....de muchas repeticiones.
Primero asocian un hecho con una consecuencia (estimulo con una acción). Esta es la típica historia de la prueba de Pavlow: si cada vez que agitamos una campanilla, le damos un trozo de carne a un perro después unas cuantas repeticiones este empezará a salivar en cuanto agitemos la campanilla. En la vida diaria esto se traduce en tu cachorro que se pone loco de alegría en cuanto te ve coger la correa porque sabe que se va de paseo.
Otra manera para tu cachorro de aprender es acertando y equivocándose. Premiando y castigando en el momento oportuno aceleras su educación. Por ejemplo si tu cachorro por casualidad abre el armario de los zapatos y destroza tus zapatos favoritos, lo tienes que castigar inmediatamente para que no vuelva a hacerlo.
Todos los métodos de educación de cachorros se basan en la filosofía del premio y castigo para amoldar el comportamiento de tu cachorro a la sociedad que nos rodea. Pero no todas las formas de premios y castigos son validas.
Como premiar bien
Es muy facil y sencillo premiar a tu cachorro y hay muchas maneras de hacerlo: halagos dichos con voz suave y cariñosa, caricias, juegos, comidas, etc.
Como castigar bien
Para castigar un cachorro suele ser suficiente usar un tono de voz fuerte y autoritaria, dar un tirón de correa, etc. En la educación de cachorros no debes nunca recurrir a castigos físicos duros o crueles ya que con estos métodos abusivos no conseguirás nada, aparte de confundir a tu cachorro y volverlo inseguro y nervioso.
Timing
Tan importante como premiar y castigar bien es hacerlo en el momento justo. Esto es muy importante si quieres obtener progresos y resultados en la educación del cachorro. Tanto el castigo como el premio debes aplicar simultáneamente a la acción, ni antes ni después.
Si tu cachorro ha hecho sus necesidades dentro de casa solo lo podrás reprender si lo pillas en el acto ya que de hacerlo después puede perder toda eficacia. Además de todo esto, no olvides que cada cachorro es diferente y que corresponde de forma diferente a su dueño. Debido a ello, hay que ser flexible y modificar estas normas para aplicarlas a cada caso en concreto. Pero recuerda que los premios son más eficaces que los castigos a la hora de educar a tu cachorro.
Conducta jerárquica:
La base del comportamiento del perro
Uno de los errores más frecuentes de la parte de muchos dueños es intentar educar a un cachorro como si se tratara de un niño pequeño. No hay que juzgar el cachorro según estándares humanos sino caninos.
El comportamiento del perro se basa en su herencia genética que lo prepara a vivir en manada siguiendo unas conductas sociales y jerárquicas. La manada esta estructurada jerárquicamente y cada individuo ocupa un puesto determinado en función de su rango. Uno del rango superior domina a uno del rango inferior y solo el "jefe de la manada" domina a todo el mundo.
Para un cachorro la familia es su manada
Es fundamental entender que cuando tu cachorro entra a formar parte de la familia esta se convierte en su "manada". A partir de cierto momento, generalmente entre los 6 y 14 meses (aunque algunos perros muy dominantes pueden manifestar conductas dominantes ya a partir de los dos meses de edad), tu cachorro intentará escalar "puestos" en la manada, negándose a obedecer ciertas órdenes, gruñéndo cuando nos acercamos a su comida o cuando intentamos sacarle algo de la boca, etc.
Se debe atajar de raiz este tipo de comportamiento "sometiendo" al animal rebelde ya que si le disculpamos con frases del tipo "pobrecito si no sabe lo que hace", "no entiende lo que le digo", o "es que es muy pequeño todavía", tu cachorro estará ganando puntos de dominancia y seguirá poniendo nuestra autoridad a prueba para subir de "rango" poco a poco.
Este comportamiento frecuente en muchos nuevos dueños de perros supone un enorme equivocación pues puede llegar a un punto que se extienda a todos los aspecto de la convivencia.
¿Cómo "someter" al cachorro de manera adecuada?
Lo primero que hay que entender es que el sometimiento no hace sufrir al perro. Es solo una forma de decirle mi rango es superior al tuyo y por lo tanto no acepto tu mal comportamiento. Así ganarás su respecto y le dejarás claro cual es su posición en la jerarquía de la familia-manada. Todos los miembros de la familia deberán demostrarle su superioridad a la menor señal de agresividad. Cogiéndole por la piel del cuello, levantándole y zarandeándole al mismo tiempo que reprendiéndole con autoridad y voz firme. Si no puedes con su peso un variante es cogerle por la piel del cuello, inmovilizándole la cabeza en el suelo al mismo tiempo que reprendiéndole con voz autoritaria y firme.
Esta forma de sometimiento debes reservar para estos casos en concreto y en ningún caso debes usar para castigar el perro cuando se comporta mal en otras circunstancias. Cuando un perro se tumba en el suelo y enseña la barriga es un reconocimiento de sumisión a la persona o perro a quien se la enseña.
El juego de tu cachorro
El juego es fundamental para los cachorros de cualquier edad tanto en la época de impregnación como de socialización ya que es la forma que tienen de relacionarse y sobretodo de aprender.
Desde que nace el cachorro juega con su madre y sus hermanos. El juego tanto tiene que ser con sus congéneres caninos como con su "manada" humana. Si cuando el cachorro viene a vivir con nosotros no jugamos con él, pueden producirse alteraciones en su comportamiento. Un perro que no juega es un perro al que le sobra demasiada energía lo que lo vuelve aburrido descontento y siempre buscando oportunidades para desgastar este sobrante de energía normalmente haciendo "trastadas" (mordiendo los muebles, arañando las paredes, causando destrozos, etc.).
El juego le proporciona alegría y un perro alegre es mucho más sociable. Además le viene muy bien físicamente para ejercitar los músculos, endurecer los huesos y liberar la tensión acumulada. Varias sesiones de juego esparcidas en el día darán lugar a un perro sano, equilibrado y alegre.
El juego además refuerza la relación amo-perro ya que crea un fuerte lazo entre el perro y su amo. Ese lazo tiene muchas ventajas para nosotros.
Hace que sea mucho mas fácil adiestrar al perro ya que este te vera como un amigo y se esforzara para complacerte y hacer lo que le pidas. Puedes usar las sesiones de juego para entrenarle a acatar las ordenes básicas, si no te obedece bastará con dejar de jugar. La siguiente vez el perro se esforzará más.
Así mismo evitarás muchos sofocos si cuando te vas de paseo con tu cachorro este piensa que eres mucho mas interesante que todas las distracciones que ve a su alrededor y sigue a tu lado en vez de vagabundear. Es también una buena manera de premiar a tu cachorro. Cuando el cachorro haya aprendido a jugar con los juguetes esto te ofrecerá la oportunidad de poder usar las sesiones de juego como premio.
Además el juego refuerza tu estatus de superioridad jerárquica sobre tu perro ya que tienes el poder de empezar y acabar el juego.
¿Cómo jugar con nuestro perro?
Juguetes de perros
Para su desarrollo es muy importante enseñarle a jugar con juguetes de perros. Jugar con tu perro no significa una lucha cuerpo a cuerpo o dejarle morder todo lo que quiera (eso solo sirve para estimular su agresividad).
¿Que es un juguete conveniente para mi perro?
Los juguetes de perros tienen que ser objetos no tóxicos, lo bastante grandes para que no pueda tragarlos, sin piezas que se puedan desprender (tipo cascabeles, pompones, etc.), que no puedan astillarse (como los palos) y que no se puedan comer (numerosos perros se acaban comiendo los palos y las piñas). En cuanto un juguete de perro se empiece a romper hay que retirarlo.
El perro debe poder diferenciar entre qué objetos le están prohibidos y los que puede morder. Así no le des zapatos viejos (o ropa etc.) para que juegue ya que seria imposible que comprenda que no puede jugar con todos los zapatos de la casa. En tiendas especializadas se venden infinidades de juguetes de perros adecuados para él (pelota, juguete de goma etc.).
Cachorro morderdor
Para un cachorro, morder es natural. Al principio puede intentar morder tus manos en vez del juguete.
¿Que hacer en ese caso?Mantener la mano que este mordisqueando quieta y cerrar el puño para que le sea más difícil morderlo y luego intentar distraerlo con un juguete. Pronto aprenderá que morder objetos es más divertido.
Algunos consejos útiles
Para evitar el aburrimiento, conviene tener varios juguetes de perros y variar entre ellos retirando unos y dándole otros.
Hay que saber que varias cortas sesiones de juegos son preferibles a una larga.
Y que al finalizar cada sesión hay que guardar el objeto y no dejárselo al perro para que este no se aburra de él y que cuando lo vea tenga ganas de jugar otra vez con él.
¿Que hacer cuando el perro "escoge un juguete" que le pueda hacer daño (tipo palo o piedra)?
No prestarle atención, rápidamente aprenderá que los juguetes que tú escojes son más divertidos.
Hay que jugar cuando el perro se porte bien y no al revés ya que si el perro se da cuenta que sacas los juguetes para entretenerlo cuando se porta mal le estarás enviando un mensaje erróneo y su conducta empeorará.
Si el perro es muy bruto jugando o muerde con demasiada fuerza hay que interrumpir el juego de inmediato y pronto entenderá que esa conducta no es tolerada.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario